Elisabeth Hellenbroich, desde Wiesbaden (Alemania)*
El pasado 30 de mayo, el periódico alemán Preubische Allgemeine Zeitung publicó una entrevista con el general de reserva Harald Kujat, ex-jefe de la Comisión Militar de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), en la cual advierte del “peligro de una escalada rumbo a un conflicto militar con Rusia”.
Empero, en una conferencia de prensa al final de su visita a Uzbekistán el 28 de mayo, en Tashkent, el presidente Vladimir Putin dio una respuesta clara a la euforia occidental sobre el envío de más armas hacia Ucrania que la capacitarían para alcanzar blancos rusos: En lo que respecta a los ataques, francamente, no tengo certeza de lo que el secretario general de la OTAN (Jens Stoltenberg) está hablando.
Si él dice sobre potencialmente atacar al territorio de Rusia con armas de precisión de largo alcance, él, como persona que encabeza una organización político-militar, incluso siendo un civil como yo, debería estar consciente del hecho de que armas de precisión de largo alcance no pueden usarse sin reconocimiento basado en el espacio. Este es mi primer punto.
Mi segundo punto es que la selección final de los objetivos y lo que se conoce como misión de lanzamiento solamente pueden ser hechos por especialistas altamente calificados, que dependen de esos datos técnicos de reconocimiento de objetivos.
Para algunos sistemas de ataque, como el (misil inglés de crucero) Storm Shadow, estas misiones de lanzamiento pueden efectuarse automáticamente, sin la necesidad del uso de militares ucranianos. ¿Quién hace esto? Aquellos que fabrican y supuestamente abastecen estos sistemas de ataque a Ucrania. Esto puede pasar y acontece sin la participación de los militares ucranianos.
El lanzamiento de otros sistemas, como el ATACMS (estadounidense), por ejemplo, depende también de datos de reconocimiento espacial, los objetivos son identificados y comunicados automáticamente al equipo relevante y, en seguida, insertados en la programación de la misión de lanzamiento correspondiente. Entretanto, la misión es organizada por representantes de los países de la OTAN, y no por los militares ucranianos.
Por ende, estos responsables de los países de la OTAN, sobre todo los basados en Europa, y en particular los países pequeños europeos, deberían estar plenamente conscientes de lo que está en juego. Deben tener en mente que sus países son pequeños y densamente poblados, antes de comenzar a hablar de atacar el territorio ruso. Es un asunto serio y, sin duda, estamos acompañando eso con mucha atención.
Y argumentó: “De forma más amplia, esta escalada interminable puede llevar a graves consecuencias. Si Europa enfrenta estas graves consecuencias, ¿qué hará Estados Unidos tomando en cuenta nuestra paridad estratégica de armas? Es difícil decir, ¿están buscando un conflicto global? Creo que ellos querían llegar a un acuerdo sobre armas estratégicas, pero no los vemos realmente ansiosos para hacerlo. Ellos están hablando sobre eso, pero no están haciendo mucho para que ocurra. Vamos a esperar a ver lo que acontece en seguida”.
Semejantes reflexiones
Fueron hechas por Putin en el Foro Económico Internacional de San Petersburgo (SPIEF -5-8 de junio), que este año contó con la presencia de 21,300 participantes de más de 130 países. En la sesión plenaria, moderada por el profesor Sergei Karaganov, de la Facultad de Economía y Asuntos Internacionales y conocido por los lectores de este informativo, este se refirió a la doctrina nuclear de Rusia, objeto de varios comentarios anteriores sobre su adaptación al conflicto ucraniano. En su respuesta, Putin dejó claro que no sería necesaria ninguna alteración especial en ella, y que estaba confiado en que Rusia vencería en el conflicto con Ucrania.
En una entrevista con representantes de 16 agencias extranjeras de noticias, en la víspera del Foro, Putin había dicho: “Estamos pensando en el hecho de que, se alguien considera posible surtir tales armas (es decir, Storm Shadows, Scalp, ATACMS, etc.) a una zona de guerra para atacar nuestro territorio y crear problemas para nosotros, entonces ¿por qué no tenemos el derecho de suministrar nuestras armas de la misma clase hacia las regiones del mundo donde serían llevados a cabo ataques a instalaciones sensibles? La respuesta puede ser asimétrica. Vamos a pensar sobre eso”.
En una reciente entrevista al canal de Youtube del ex-juez estadounidense Andrew Napolitano, el ex-diplomático británico Alastair Crooke comentó que Putin alertó recientemente que la OTAN y otros están “jugando con fuego”.
Para Crooke, la declaración implicaba que si atacáramos profundamente en el territorio ruso y usamos armas para alcanzar blancos estratégicos, podría haber una fuerte respuesta que no se limitaría a Ucrania, sino sería dirigida hacia cualquier parte del mundo, por ejemplo, Polonia, pero también Francia. Y la pregunta es si, en este caso, EUA intervendría.
*MSIA Informa