diciembre 03, 2025

Sonámbulos, ¿rumbo a la guerra apocalíptica con Rusia?

Sonámbulos, ¿rumbo a la guerra apocalíptica con Rusia?

En una entrevista reciente concedida al periódico italiano Corriere della Sera, el influyente consejero estratégico del presidente Vladimir Putin, renombrado especialista en seguridad, el profesor Serguei Karaganov, afirmó que Rusia no está librando una guerra con Ucrania, sino en realidad, está librando una guerra contra Europa, la Europa de Napoleón y de Hitler.”

Elisabeth Hellenbroich, desde Wiesbaden (Alemania)*

A pesar de las dudas erráticas del presidente estadounidense Donald Trump, Karaganov afirmó que en la reunión con Putin en Achorage, en agosto pasado, aquel dio un paso significativo hacia la paz. “Trump sabe que Rusia está obligada a vencer en la guerra. El tiempo es muy corto y, por ello, tiene que hacer su elección, o está con nosotros (con Rusia) o con Europa,” dijo.

La reunión de jefes de Estado de la UE termina en desorden

La reciente reunión de jefes de Estado de la Unión Europea (UE) realizada en Bruselas los días 23 y 24 de octubre, revela de forma chocante que no hubo la pregonada unidad, al contrario lo que hubo fue: el desorden, la incompetencia y, por encima de todo, una fuerte “pose” de los líderes presentes, quienes, en realidad, saben que fracasaron catastróficamente en la guerra de Ucrania.

La mejor prueba de su incompetencia es que, por casi cuatro años, ningún líder europeo, descontando al Primer Ministro húngaro Víctor Orbán, quien si exploró una solución diplomática a la guerra en diálogo con Moscú.

El comunicado oficial de la reunión afirma que el Consejo Europeo resalta la necesidad crítica de garantizar que Ucrania permanezca firme y que disponga de los medios presupuestarios y militares para seguir ejerciendo su derecho inherente a la autodefensa y a combatir la egresión de Rusia.

El párrafo 7 resalta que la UE “seguirá proporcionando a Ucrania apoyo financiero regular y previsible a largo plazo,” y que “en 2025, la UE puso a disposición de Ucrania 20.500 millones de Euros, de los cuales 6.500 fueron desembolsados por medio del Mecanismo para Ucrania y 14 mil millones por la Iniciativa de Préstamos de Aceleración Extraordinaria de Ingresos (ERA) del G-7, que son por las “ganancias extraordinarias” provenientes de los activos rusos inmovilizados.

Desde el inicio de la guerra de agresión de Rusia

La UE y sus estados miembros pusieron al alcance de Ucrania y de su pueblo 177.500 millones de euros.” Y ese monto ni siquiera incluye el dinero transferido por Estados Unidos. Ahora bien, cuando resulta evidente que Ucrania estará en quiebra en 2026, la UE dio un paso, la UE dio un paso más para tratar de utilizar todos los activos congelados, con valor de 177 mil millones de euros, en forma de un crédito de reserva concedido a Ucrania y garantizado por cada Estado soberano del Consejo de la UE.

Hasta ahora, la presión del canciller alemán, Friedrich Mertz, y de la presidente de la Comisión Europa, Ursula von der Leyen, para el uso de los 170 mil millones en activos inmovilizados de Rusia depositados en el Banco Eroclear de Bruselas, no tuvo éxito. Gracias a Víctor Orbán y al primer ministro eslovaco Robert Fico, se pospuso la decisión final para la siguiente reunión cumbre de diciembre. Leemos, entonces, en el párrafo 8 del comunicado:

Sometidos a la legislación de la UE, los activos de Rusia deben permanecer inmovilizados hasta que Rusia no detenga su guerra de agresión contra Ucrania y la compense por los daños causados por su guerra.

El rechazo más vehemente al uso de los activos rusos provino del primer ministro belga, Bart de Wever, quien, en una entrevista colectiva del 24 de octubre, subrayó que, históricamente, incluso ni durante la Segunda guerra mundial, los activos enemigos fueron usados como pago de “reparaciones.” Observó también que existen enormes obstáculos legales, dado que Rusia también podría confiscar activos de empresas extranjeras en su territorio. A lo que se agrega que no está claro quien garantizaría los activos capturados, en el caso de una victoria rusa en la guerra. De Wever afirmó que eso sólo lo podrían garantizar estados nacionales soberanos individuales del Consejo Europeo y, enseguida, que representen a la Comisión.

Orbán: “La UE presa de psicosis de guerra”

En una entrevista en Bruselas el 24 del presente, Orbán criticó con dureza la reunión de la UE: Europa está quebrada, con sus líderes “presos de una psicosis de guerra,” al mismo tiempo que calificaba de suicida la política de sanciones contra Rusia. Recalcó que el presidente ucraniano, Volodómir Zelensky, quien participó también en la reunión de Bruselas, “quiere arrastrar al número más grande posible de países a la guerra. Estamos contra eso. Sugerimos que haya negociaciones de paz, que se busque un plan de paz concreto.”

Se opuso vehementemente también a la propuesta del uso de los activos financieros rusos congelados, lo que crearía un serio precedente. Y tanto él como Fico se negaron a participar de la nueva ayuda militar financiera (excepto ayuda humanitaria) para Ucrania.

Orbán rechazó categóricamente también la posibilidad de que Ucrania se volviese miembro de la UE. Esto arrastraría a toda la UE a la guerra y sería una forma segura de hacer más intenso el conflicto, afirmó. También hizo una vigorosa alerta sobre la forma en que Ucrania trata a la minoría húngara en Ucrania.

Fico, igualmente, no sólo expresó total solidaridad con Orbán en cuanto a la necesidad de una reunión cumbre en Budapest, también se manifestó vehementemente contra el empeoramiento de la guerra de Ucrania, impulsado por la “coalición de los dispuestos” (Starmer, Macron, Merz, et al). Lamentó que ninguno de los jefes de Estado de la UE haya hecho ni el menor esfuerzo para dialogar diplomáticamente con Putin.

Foto: Mojpe

Especialistas militares europeos escépticos en cuanto a prolongar la guerra

Vale la pena saber lo que algunos de los observadores militares más experimentados de Europa tengan que decir sobre la situación real de la guerra de Ucrania. Tiene más de tres años que vienen diciendo la verdad, aunque sus análisis han sido rechazados con dureza y negados. Desde el inicio han afirmado que Ucrania no tiene como vencer en la guerra, ni siquiera con el respaldo de la UE ni el de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), excepto con la participación directa de esta, con consecuencias mundiales devastadoras. Rusia es hoy la vencedora de hecho y puede dictar los términos de la paz.

Entre esos especialistas está el expresidente del Comité militar de la OTAN, el general alemán retirado, Harald Kujat, y el exoficial del servicio de inteligencia suizo, el coronel Jaques Baud, quienes desde el inicio han analizado con competencia como la guerra fue provocada y como la primera conferencia de Estambul, en marzo de 2022, fue saboteada por Estados Unidos y Gran Bretaña. También destaca el coronel suizo Ralph Brosshard, quien trabajó para la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), el exalcalde de Hamburgo, el exministro Klaus von Dohnayi, quien, junto con el general de brigada retirado Erich Vad (exasesor de la excanciller Angela Merkel) publico recientemente el libro “¿Guerra o paz? Alemania en una encrucijada.”

En un artículo en el sitio de internet Nachdenkseiten (10/102025), el periodista Tilo Gräser comenta el pensamiento de Kujat, Baud y Brosshard. Para él, los tres especialistas se lamentan de que la reunión de Anchorage entre Trump y Putin no haya dado los resultados esperados.

Además, ellos desaprueban que Trump haya señalado su intención de apoyar a Ucrania con misiles Tomahawk (agregando que Keith Kellogg, enviado especial de Trump para Ucrania, haya escrito que Estados Unidos daría información de inteligencia para los ataques contra la infraestructura energética en el interior de Rusia).

Estados Unidos, según Kujat, lo está haciendo desde hace mucho tiempo, como salió a la luz con los ataques ucranianos contra el sistema de alerta temprana estratégica y contra la flota de bombarderos estratégicos rusos.

Baus, a su vez, no ve nada de nuevo en la declaración de Kellogg. Tanto él como Kujat destacaros que Estados Unidos, hasta el momento, no han dado luz verde para el uso de los Tomahawks.

Brosshard destacó que Kiev, desde 2024, “quisiera poner al mundo entero en guerra con Rusia.” Según él, la declaración ucraniana en la OSCE -en particular, el embajador Igor Prokopchuk- trata desde hace años de conquistar el número más grande posible de apoyo. “Pero, de los 193 estados-miembros de Naciones Unidas (NU), sólo un grupo, el de la UE y de la OTAN, están dispuestos a dar tal apoyo.”  Y de Ellos, “tan sólo algunos están listos para entrar en guerra al lado de Ucrania contra Rusia.” Si los europeos financiaran las armas necesarias y las compraran a -estados Unidos, eso sería doblemente lucrativo para Estados Unidos.

Kujat destacó que el problema es “más complejo” que lo que parece:

Ucrania sencillamente no tiene la capacidad para disparar los Tomahawks a zonas profundas de Rusia.

…Esos misiles están destinados originalmente a navíos de guerra que Ucrania no posee. Los sistemas de lanzamiento desde tierra se crearon recientemente para ese propósito. Existen actualmente tan sólo dos baterías operacionales, con una tercera para instalarse en Alemania el año entrante. Estados Unidos tiene la intención de mantener un inventario mínimo para sus propias operaciones y, además, correrían ciertamente el riesgo de que esa nueva tecnología sensible caiga en manos de los rusos.

De acuerdo con Brosshard, la implantación de misiles de crucero “significa que los estadounidenses determinarían efectivamente los blancos que serían atacados y cuales no lo serían.” Kujat duda que los misiles pudieran decidir la guerra en favor de Ucrania. Con su “potencial superior en armas hipersónicas y de misiles de corto y medio alcance con ojivas múltiples controladas independientemente,” Rusia ofrece un “dominio de escalada incomparable. Ni Estados Unidos ni el gobierno ucraniano parecen percibir que una implantación sólida de misiles Tomahawk podría llevar a Rusia a usar ese enorme potencial destructivo.”

Putin anunció el 26 de octubre, la conclusión de dos pruebas con el misil de crucero de propulsión nuclear Burevestnik, con alcance superior a los 15 mil kilómetros y capaz de destruir cualquier blanco alrededor del globo.

Baud agregó que Zelensky, así como el premier israelí, Benjamín Netanyahu, al parecer siguen una cultura nihilista y no conoce límites y nadie se los presenta. Ambos están dispuestos a causar una catástrofe mundial, aunque no puedan alcanzar sus objetivos. También alertó que un ataque a la dirigencia rusa y al Kremlin conduciría a una respuesta masiva. Y, de acuerdo con la estrategia nuclear revisada de Rusia, esto correspondería a los criterios para el uso de armas nucleares, lo que tendría consecuencias para toda Europa.

Kujat observó también que Occidente, al insistir en que Rusia ha trazado líneas rojas constantemente, pero que no ha reaccionado cuando estas son cruzadas, está “juzgando mal” la estrategia de escalada de Rusia. “Rusia tiene un límite de tolerancia muy alto y hasta ahora respondió con tan sólo una pequeña escalada a los ataques ucranianos, como los realizados contra los campos de aviación de la flota de bombarderos estratégicos. El uso de misiles de crucero Tomahawk contra blancos estratégicos rusos, como centros de comando, sería un giro en el estilo de la guerra de Rusia. Podría, entonces, pensar en pasar de una guerra de desgaste a una guerra de destrucción.”

Según Brosshard:

En la guerra de información, Ucrania puede escalar cuanto quiera, así como con ataques con numerosas bajas civiles y graves daños colaterales que serán perdonados por el público occidental. Sin embargo, en una guerra ‘real,’ el Kremlin tiene dominio de la escalada y puede ir mucho más lejos que Ucrania.

Kujat, Baud y Brosshard defienden el reinicio de las negociaciones para terminar la guerra. El general ve, actualmente, otro punto de no retorno sobre si la guerra terminará o seguirá escalando, “con riesgo de que se extienda a todo el continente europeo… Pero ambos lados deben dar pasos en dirección al otro. Nosotros (los europeos) no estuvimos dispuestos ni fuimos capaces de presentar nuestra propia propuesta en años y medio, fuese cual fuese. A Alemania se le está preparando mentalmente, de hecho, para la guerra y los europeos son ahora prisioneros de sus propias estrategias.”

About The Author

Maestra en Periodismo y Comunicación; directora de noticias, editora, jefa de información, articulista, reportera-investigadora, conductora y RP. Copywriter de dos libros sobre situación política, económica y narcotráfico de México; uno más artesanal de Literatura. Diversos reconocimientos, entre ellos la Medalla de plata por 50 Aniversario de Radio UNAM y Premio Nacional de Periodismo, categoría Reportaje.

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